1. Este dibujo se titula "On cloud 9", en donde se puede apreciar a Lennon y a Ono, desnudos sobre una nube. Dicha expresión en inglés es sinónimo de felicidad y también está relacionada con el budismo, siendo una de las máximas etapas de la iluminación.
2. "Imagine Peace" es el retrato de la familia conformada por John, Yoko y su hijo Sean.
3. "Dream Power" es el nombre de este boceto que posee poco color y en donde se puede ver a Lennon y a Ono, desnudos, descansando bajo la sombra de un árbol.
4. Lennon realizó este boceto al cual tituló "The Land of Milk and Honey", una analogía que hace referencia a lo que muchos piensan de los Estados Unidos de forma errónea, al creer que se trata de la llamada "tierra prometida".
5. En 1980, el cantante lanzó el sencillo "Starting Over", con el cual hace una oda del amor que vivía en ese momento con Yoko Ono. No contento con la canción, realizó este boceto al cual le dio el mismo título.
6. Este dibujo resultó ser el complemento perfecto de su canción "Power to the People", trazado al que precisamente nombró "Power to the People II".
7. Extraña manera la de retratarse John Lennon en blanco y negro en un dibujo a color llamado "Peace brother".
8. "Small Pig, Happy Pig" es uno de los dibujos que realizó Lennon para estrechar lazos con su hijo Sean y como una herramienta útil para enseñarle los colores y el alfabeto.
9. Otra de las obras del artista que parece haber sido hecha por un niño es este dibujo llamado "Fish Winking".
10. "Camel Dances" fue la manera en como bautizó John Lennon a este dibujo hecho en serigrafía y que retrata la forma en como él veía la vida.
El roquero estadounidense Tom Petty, que falleció el pasado octubre a los 66 años, murió por una sobredosis accidental de opiáceos, según los resultados de la autopsia desvelados hoy por la familia del músico.
Petty sufría de enfisema pulmonar, problemas en la rodilla y de una fractura de cadera. Los familiares de Petty indicaron que, entre otras sustancias, el músico tomaba fentanilo (Fentanyl). Este analgésico es entre 80 y 100 veces más potente que la morfina y entre 25 y 40 veces más fuerte que la heroína, de acuerdo con el informe de 2015 sobre narcóticos de la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA).
Prince, un icono de la música pop, falleció a los 57 años el pasado 21 de abril de 2016, por una sobredosis accidental de fentanil, un analgésico opiáceo sintético, según ha revelado la autopsia practicada por un forense de Minnesota terminando con semanas de especulación.
El informe médico acaba con semanas de especulación sobre las causas de la muerte del músico a los 57 años en su casa-estudio de Paisley Park —situada en Chanhassen, Minnesota—. Las autoridades todavía tienen que aclarar cómo obtuvo Prince el fentanil y si se lo había recetado un médico.
Las sobredosis de drogas mataron a aproximadamente 64,000 personas en los Estados Unidos el año pasado, según el primer recuento gubernamental de muertes por drogas a nivel nacional para cubrir todo el 2016. Es un aumento asombroso de más del 22 por ciento sobre las 52,404 muertes por drogas registradas el año anterior.
Se espera que las sobredosis de drogas sigan siendo la principal causa de muerte entre los estadounidenses menores de 50 años, ya que los opiáceos sintéticos, principalmente el fentanilo y sus análogos, continúan empujando el recuento de muertes al alza. Las muertes por drogas que involucraron al fentanilo se duplicaron con creces entre 2015 y 2016, junto con un aumento en las muertes por cocaína y metanfetamina. Juntos se suman a una epidemia de sobredosis de drogas que está matando gente a un ritmo más rápido que el V.I.H en su máximo apogeo.
En el gráfico se ve claramente el boom de muertes por sobredosis de Fentanilo y análogos en los últimos años.
Información extraida del NewYorkTimes, ElPais y ElMundo.
Como buen fan del genial irlandés, recibí con alegría la noticia de que se iba a publicar un libro en castellano sobre su persona. Nunca está de más revindicar la vida y la obra de un músico como Rory Gallagher. De los de carne y hueso. Un tipo que hizo bandera de la humildad y de la entrega absoluta a su mayor pasión desde el primer al último minuto. Fiel a sus principios, y convencido de que nunca debía traicionar ni su música ni a su público. Una vez con el volumen en mis manos, debo decir que la desilusión ha sido mayúscula: es posible que funcione como guía para los no iniciados o como introducción a su legado, pero este título carece de interés (salvo algunas de las imágenes contenidas en el apartado fotográfico) para los seguidores veteranos. Desencanto que se ve acentuado todavía más ya que el autor, el periodista argentino Marcelo Gobello, tiene una dilatada trayectoria como crítico musical y creo que se le puede -y debe- exigir algo mucho más concienzudo y completo que lo contenido en ‘Rory Gallagher: El Último Héroe’. Tras unos prólogos que no aportan nada (sobretodo, prescindible y raquítico el de Donal, hermano de Rory y guardián de su herencia), se ventila tres décadas de carrera de forma veloz y esquemática en apenas cuarenta páginas, incluidas las de fotos, sin profundizar en absoluto ni en el personaje ni en sus circunstancias vitales y completa el asunto con una entrevista publicada en Guitar Player en el ‘78, un análisis a vuela pluma de su discografía, una cronología telegráfica, una anecdótico texto sobre su primer concierto en España… y poco más. Decepción absoluta. Mejor dirigir esfuerzos, en caso de no haberlo hecho y de dominar el inglés, hacia ‘His Life and Times’, de Marcus Connaughton, o ‘Riding Shotgun: 35 Years on the Road with Rory Gallagher and Nine Below Zero’, de su compinche Gerry McAvoy. Rory merecía más. Mucho más, sin duda alguna.
Biografías de Philip Lynott habíamos leído varias, pero podemos decir con toda sinceridad que ninguna como Cowboy Song, un excepcional trabajo de Graeme Thomson editado originalmente el año pasado (coincidiendo con el trigésimo aniversario de la muerte del inolvidable cantante, bajista y compositor irlandés) y que Es Pop publicará en España el próximo mes de mayo. Aunque se trata de la primera biografía oficial escrita con la cooperación de la familia Lynott, que ha aportado numerosos documentos y valiosa información inédita a la obra, Cowboy Song no es ni mucho menos una hagiografía ni tampoco un relato idealizado o sesgado del malogrado líder de Thin Lizzy. Thomson traza con férreo rigor un retrato poliédrico, complejo y completo de Lynott, con todas sus luces y sombras, sin pasar por alto ni dulcificar los detalles más turbulentos y en última instancia dramáticos que condujeron a su prematuro fallecimiento a la edad de treinta y seis años.
El libro explora las fascinantes contradicciones entre los desmedidos excesos del Lynott rockero y la vida del tímido y sensible “huérfano” criado por su abuela en un barrio obrero de Dublín. Hijo ilegítimo de una adolescente católica irlandesa huida de casa y de un emigrante guyanés llegado a Inglaterra como polizón, Lynott se sobrepuso a las penurias de su primera infancia, al asombro que despertaba el color de su piel en un entorno en el que era verdaderamente único y a una hiriente y permanente sensación de abandono, para acabar convirtiéndose en la primera estrella de rock surgida de Irlanda. Cowboy Song examina a fondo su trayectoria musical, así como la singular mezcla de influencias culturales que dieron forma a sus canciones, en las que ricas tradiciones líricas, mitológicas y poéticas irlandesas fueron a encontrarse con el rock duro, el folk progresivo, el soul e incluso la Nueva Ola.
Aunque Graeme Thomson estaba familiarizado con la música de Lynott y Thin Lizzy, el grupo con el que triunfó en los años setenta gracias a himnos como “Jailbreak”, “The Boys Are Back in Town” y “Dancing in the Moonlight”, lo que realmente llamó su atención fue el abismo entre el personaje carismático y chulesco proyectado por Lynott sobre el escenario y sus letras a menudo delicadas y dotadas de una gran sensibilidad. “Su escritura tenía algo que me intrigaba”, cuenta el autor. “Daba muestras de una verdadera sensibilidad poética que parecía darse de bruces con su manera de presentarse ante el público. Aquél fue el punto de partida. Me pareció un tío interesante con el que pasar una temporada”.
Lynott era un lector voraz, devoto de Camus y F. Scott Fitzgerald. Publicó dos volúmenes de poesía y adoraba a Frank Sinatra, pero también creía que la gente esperaba cierto comportamiento por parte de las estrellas de rock y asumió tal comportamiento con entusiasmo. “Quise explorar la dicotomia de alguien que, en el fondo, es bastante callado y reflexivo pero que extrae gran parte de su autoestima y su identidad del hecho de ser una estrella de rock y que explota esa imagen”, elabora Thomson. “La descarada masculinidad de Lynott no contaba con precedentes en la música irlandesa y tuvo un impacto casi revolucionario. Pasó a representar una figura de poderío en un país todavía aquejado de un intenso complejo de inferioridad. Transmitía una sensación de seguridad cultural que fue asimilada por aquellos que siguieron su estela”.
Graeme Thomson es autor de varios libros sobre música, entre ellos Under the Ivy: The Life & Music of Kate Bush y Behind the Locked Door, una biografía de George Harrison. Sus artículos aparecen con regularidad en publicaciones como The Guardian, Uncut, GQ, Mojo y Rolling Stone. Para elaborar su biografía de Philip Lynott, ha realizado decenas de nuevas entrevistas exclusivas con familiares, amigos, colegas, compañeros de grupo y colaboradores, que se complementan a la perfección con un riguroso trabajo de documentación y hemeroteca. El resultado final se asemeja por momentos al de una historia oral, reflejando en toda su complejidad las múltiples facetas de un verdadero icono del rock y brindándonos lo más parecido que tendremos nunca a una biografía definitiva de Philip Lynott.
“Un relato auténtico, entretenido e irreverente. Lo que tenemos aquí no es un panegírico, sino un testimonio sincero y por momentos doloroso del precio asociado al estrellato”.
—Sam Boland, The Irish Examiner
“Una crónica seria y minuciosa tanto del auge como de la caída de Phil. Meticulosamente documentada, rica en detalles”.
—Paul Brannigan, Classic Rock
“Ningún libro hasta ahora le había tomado tan bien la medida”.