domingo, 19 de enero de 2025

07/02/1976 Memorial Fieldhouse, Muhlenberg College, Allentown, Pennsylvania.

 



Kansas y Gallagher llenan el estadio

Ron Langella para The Muhlenberg Weekly

Una multitud de más de 3.700 personas asistió a lo que posiblemente fue la mejor actuación doble en la historia de los conciertos de Muhlenberg. Tanto Kansas como Rory Gallagher ofrecieron actuaciones sobresalientes, cada uno de ellos ofreciendo al público lo mejor de sus respectivos estilos.

Rory Gallagher, rockero escocés que aprendió sus ritmos de un aprendizaje con Muddy Waters, recompensó a un grupo incondicional de fieles seguidores con una actuación dinamita. El resto del público se rindió rápidamente a sus lamentos, a sus chisporroteantes licks y a su teatralidad sobre el escenario, que hicieron de él un auténtico placer.

Rory estuvo rockeando desde el principio 'Messin' with the Kid', una marca registrada de Rory Gallagher, introdujo el estilo ardiente de Gallagher. Gallagher garantizó que su nuevo álbum, Against the Grain, aumentara las ventas de la zona con grandes interpretaciones de 'I take What I Want', 'Let Me In' y 'Souped-Up Ford'. La combinación de 'Cradle Rock - Let Me In' mostró a Rory en su mejor momento, respondiendo como un obsesionado Padre Damein intentando exorcizar hasta la última nota de su desgastada Stratocaster. Rory se apoyó mucho en su vibrato y añadió un toque de slide tan sabroso como el de Duane Allman. Para cerrar con «Souped-Up Ford», Rory introdujo también una armónica bastante potente. Un público agradecido dio la bienvenida a Gallagher para un bis extenso que permitió a todos los miembros de la banda (Rod Dearth, batería; Gerry McAvoy, bajo; y Lou Martin, teclados) tocar en solitario. La actuación de Gallagher generó un nivel de emoción que estaba seguro de que Kansas no podría superar.

Pero mientras Gallagher es ante todo un rockero, Kansas, con su estilo diversificado, ofreció una actuación igual de excepcional.

Kansas abrió con «Song for America», una canción que demuestra la capacidad de la banda para entrelazar un excelente trabajo de teclados y sintetizadores con el genio del violín de Robbie Steinhardt.

 







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