GALLAGHER COMO EN LA GUERRA
Son músicos que no necesitan entretener a
la galería con hazañas espectaculares, aunque dudosas, porque su trabajo habla
por sí solo. Rory Gallagher es un nombre que entró en la música por la música,
y a este hombre sólo le preocupa el trabajo bien hecho y la emoción pura. Su
lenguaje es el de un hombre que vive, que no posa...
Por
Emmanuel POTTS
¿Está harto del negocio de la música y por
qué creó su propio sello discográfico (CAPO Records) con su hermano y manager?
Fui
artista de Chrysalis durante mucho tiempo y me dejaron en paz en cuanto a mi
visión de la música, que es vital para mí.
Pero
siempre hay gente alrededor de un artista en particular, gente que da consejos
que no son creíbles, y a la larga eso resulta irritante. La razón por la que
fundé CAPO Records es para poder controlarlo todo, y este nuevo álbum (Fresh
Evidence) es un auténtico bebé, al que hay que cuidar día y noche... Requiere
mucho esfuerzo y atención, ¡pero al menos es todo tuyo y la fuente de placer es
enorme!
Mark Feltham (ex 9 BELOW ZERO) toca la
armónica en «Fresh Evidence». ¿Qué opinas de la escena pub-rock británica (los
últimos 9 BELOW ZERO, pero también los valientes DOCTOR FEELGOOD y THE
INMATES)?
Mark
es un armonicista increíble que puede permitirse tocar con cualquiera, ¡y digo
con cualquiera! Es cierto que la escena del pub-rock británico te hace sonreír,
porque desde fuera parece una batallita organizada por veteranos del rock.
Pero
siempre he tenido mucho respeto por una banda como DOCTOR FEELGOOD y tanto
Wilko Johnson como John Mayo son muy buenos guitarristas. La única pequeña
molestia que tengo con la escena del pub-rock es que sus bandas tienen
demasiada tendencia a interpretar sistemáticamente versiones del mismo estilo,
en su mayoría rítmicas. No hay nada malo en ello, pero prefiero componer más
por mí mismo y aventurarme más atrás en el tiempo en términos de empaparme del
blues.
¿Cómo se explica la aparición de un
acordeón en el muy colorido «King Of Zydeco»? Menciona a Clifton Chenier, pero
¿quién de los jóvenes conoce a este gran músico?
Mi
problema es que tengo una lista interminable de ídolos. Clifton Chenier murió
hace unos años, tristemente, en el anonimato. No quiero parecer pretencioso,
pero cada vez que fallece uno de mis héroes, intento rendirle un pequeño
homenaje, lo que explica el acordeón de «King Of Zydeco». Esta canción
desprende para mí una atmósfera particular, casi depresiva, y la concebí como
una pequeña película en la que tenía la imagen de un tipo deprimido que conduce
por la noche, sin saber realmente si la vida vale la pena... pero persevera.
Cuando la melancolía desemboca en algo positivo, ¡el blues cumple perfectamente
uno de sus papeles!
Vuestro nuevo álbum es muy bluesy, una
clara vuelta a vuestras raíces. ¿Estáis más satisfechos con esta música que
durante vuestro periodo casi hardcore (véanse los álbumes «Calling Card»,
«Photo Finish», «Top Priority» y el feroz “Stagestruck”)?
«Fesh
Evidence» simplemente contiene todos los sonidos y emociones que recorren mi
vida en este momento. Este álbum es realmente personal y lo necesitaba de
verdad.
No
niego el hard rock de algunos de mis discos, ¡pero no es lo que me motiva en
este momento! Pero, quién sabe, siendo la naturaleza humana como es, puede que
vuelva a cruzar espadas con el hard rock en el futuro... Para ser sincero, no
lo sé.
¿Escuchas y disfrutas con los nuevos
grupos, independientemente del tipo de música que toquen?
Para
ser honesto, mi preferencia es definitivamente por los viejos maestros y las
únicas bandas nuevas que encuentro interesantes son todas irlandesas: THE
POGUES. HOTHOUSE FLOWERS y THE BLACK VELVET BAND. Ya sé que eso no es rock,
pero de donde yo vengo, todo es sentimiento. En cuanto al hard rock, me da
igual, porque el género se nutre ahora de una retahíla de clichés (decorados
fastuosos, letras dudosas, sobreamplificación, etc.) que no me emocionan. Hay
grandes talentos, como Joe Satriani o Yngwie Malmsteen, pero para mí carece de
cierto sentimiento, ¡y eso es muy valioso para mí!
¿Planea su carrera o se deja llevar por su
instinto?
Por
el momento, y para «Fresh Evidence», el instinto se ha impuesto
definitivamente. Creo que es más fuerte que yo y forma parte de mi
personalidad. No hay un plan a largo plazo, pero sé lo que voy a hacer en los
próximos meses. Más allá de eso, no lo sé realmente; da miedo, pero también es
una fuente de motivación y de lucha.
¿Cree que la televisión y el mundo del
vídeo han acabado con el misterio que antaño era inherente al rock?
Como
aficionado al cine, el vídeo me parece muy interesante desde el punto de vista
técnico, pero cuando la música se pone en primer plano, me parece que se
transmite mediante una serie de imágenes que tienden a superponerse. Los
clichés se imponen y todo tiende a ser demasiado fácil. Los vídeos musicales de
hoy en día se basan demasiado en la extravagancia visual a todos los niveles, y
la propia música parece, como resultado, burlada. Así que creo que el misterio
del rock se ha desviado por algún lado, pero así es la ley del negocio del rock
y el progreso....
Como músico, ¿con quién le gustaría más
tocar?
Mis
favoritos serían Big Bill Broonzy, Django Reinhardi, que es un genio, Martin
Carthy, John Hammond por su perfecta interpretación de la historia del blues,
John Lee Hooker, Eddie Cochran, que era puro rock crudo y minimalista. Johnny
Burnette y su trío de Rock 'n' Roll y John Coltrane. Pero también he tenido la
suerte de trabajar con figuras monumentales como Jerry Lee Lewis y Muddy
Waters. Albert King, Albert Callins, Jack Bruce y Charlie Watts.
Aprecio
enormemente a toda esa gente, y entre los recién llegados, o digamos que no tan
veteranos, me complace escuchar a Jeff Healey, Bonnie Raitt, Billy Gibbons, Stevie
Ray Vaughan, Johnny Winter y ese soplador de ritmos que es George Thorogood. Lo
tiene, ¡pero sus últimos discos han sido demasiado alterados en su lenguaje
sonoro por una producción demasiado pulida! Hace unos años, publiqué un álbum
llamado 'Jinx', que no era ninguna belleza de producción, pero que no tuvo
ninguna difusión en la radio americana. La razón que me dieron fue que sólo
funcionaba un sonido determinado. Lo trágico es que sea una sola persona la que
tome decisiones tan increíbles: equivale al fascismo y es absolutamente
repugnante. ¿Qué derecho tiene esta persona a decidir lo que suena en la radio
y lo que no? No hace falta que te cuente todos los prejuicios que he sufrido
por la falta de exposición mediática de este disco 1 Pero yo, como muchos
músicos de verdad, siempre lo llevo dentro y cuando está ahí, ¡nada puede
desalojarlo!
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